“El olvido es la segunda muerte, a la que temen los espíritus más que a la primera”.
Stanislas Bouffers
En todas las culturas los antepasados y ancestros han sido y son honrados, hablé de cómo lo hacen los mexicanos, los chinos y los guatemaltecos en otros posts.
Por contra, parece que las nuevas generaciones occidentales nos estamos desconectando paulatinamente de la muerte y los muertos. Nuestros pueblos y ciudades esconden a los moribundos en los hospitales y los cadáveres rápidamente desaparecen, en 48-72 horas se llevan a los tanatorios (hasta hace nada se velaban en casa), pocas horas después se entierran o incineran y no hay tiempo de procesar lo que ha pasado porque los permisos por fallecimiento de familiares son exiguos.
La muerte es un tabú, es el tabú del siglo XXI
Pasa el tiempo y olvidamos los muertos. En España ya no se visita masivamente los cementerios el 1 de noviembre, ni ese día, ni otros llevamos flores a las tumbas de nuestros muertos. Confieso que yo no he ido un solo año a hacerlo pero sí he ido a presentar mis respetos ante las tumbas de mi familia regularmente.
Los cementerios me dan paz, son lugares que permiten reflexionar sobre el sentido de la existencia con la tranquilidad que eso requiere. Hace poco en un taller pregunté si los asistentes visitaban cementerios y todos me miraron con cara de “¡pero qué me estás contando!”.
Seguramente es una costumbre que ya no entra en los planes de la generación X y menos de los millenials y eso no quita que todas estas personas tendrán que encontrar maneras propias de recordar a los que ya no están en este plano sino quieren crearse un bloqueo.
No es serio este cementerio
Tanto si vas dejar flores a tus muertos el 1 de noviembre como si no pisas un cementerio por miedo a que los muertos te contagien su estado… Esta canción con increíble estribillo escrito por José María Cano es para ti… Porque en realidad no vale la pena tomarse demasiado en serio ni a la muerte ni a los muertos, por eso el Día de Todos los Santos es una oportunidad tanto de celebrar la vida como de conectarte con tus miedos a la muerte.
Es sano pensar en la muerte
Todos nos hemos de morir tarde o temprano y por el camino todos tendremos que experimentar duelos difíciles (niños incluidos). La muerte parece que es algo invisible y tenemos muchas oportunidades para enfrentarnos al tabú cotidianamente (entre ellas hacer el árbol genealógico).
Mi propuesta para Todos los Santos es abordar el tema de la muerte hablando con la mano en el corazón de los que ya no están vivos (sean muertos recientes, antepasados o ancestros) con la familia, es una manera de poder normalizar el hecho de morir.
Si aprovechas el día festivo para comer con los tuyos saca el álbum de fotos familiar y hablar…
Habrá risas y algunas lágrimas, es lo que toca.
Hacerlo te ayudará e enfrentarte en buena compañía a un asunto delicado, conseguirás más tranquilidad respecto a lo inevitable y poco a poco lo integrarás y transmitirás.
¿Qué vas a hacer el 1 de noviembre?
¿Cómo recordarás a tus muertos?
Fotografía: Enrique Domínguez
A casa meva, la mare encenia una papellona d’oli per cada difunt de la familia, . Les tombes dels avis hi son a mes de 1000KM. LLuian el 1 Tots Sants i el 2 Dia de Difuns 48 hores ininterrumpudes. Jo ho continuo fent, pero en lloc de papellones d’oli encenc espelmes sense fum. Els pares van ser incinarats. No tinc tombes per visitar.
Pero aixo no m’impideix honorar la seva vida i el seu destí
Hola turmalina,
Aquesta nit he estat pensant en els meus morts, sobretot en els avis, sé que a ells els agradaria que jo els recordés, estarien contents només per això.
A mi també m’agrada encendre espelmes però molt més mirar fotos.
Una abraçada!
hola, me encanta tu blog!! soy de mèxico y aqui celebramos a la muerte, les ponemos altares con comida y cosas que les gustaban a nuestros muertos, flores, incienso etc… todo es muy colorido y hermoso, pero como tu lo mencionas en tu articulo, por desgracia el avance tecnologico y la modernidad esta creando un alejamiento de estas hermosas costumbres, lo cual es muy triste, sin embargo, hay mucha gente que año con año trata de involucrar a los mas pequeños a estas festividades. te mando un fuerte abrazo y te dejo un link en el que puedes apreciar este bello festejo, en mi estado ( Hidalgo) lo llamamos “Xantolo” http://www.cdi.gob.mx/xantolo/xantolo.html
aunque de nombre varia de estado (provincia) a estado
Hola Sarahi,
Gracias por escribir. Creo que la manera mexicana de celebrar el Día de los muertos es una de las más bonitas e interesantes. El colorido, los homenajes, los reencuentros. Tenemos mucho que aprender aunque aquí en Barcelona desde hace unos años en locales y restaurantes se pueden visitar altares de muertos, este año hay uno dedicado a Sara Montiel.
Nos leemos!
A mi me gusta recordar a los míos a menudo, hay situaciones u objetos que me los traen a la memoria y que me provocan risas, lágrimas y siempre mucha ternura. Me parece triste que se acabe con la costumbre de visitar los cementerios y llevar flores a nuestros muertos, aunque reconozco que yo nunca lo he hecho en esta fecha. En casa procuramos que las sepulturas estén con flores y cuidadas, pero lo hacemos unos u otros a lo largo del año. De hecho, a mi me gusta mucho visitar cementerios y ver las tumbas y sus inscripciones, da mucha paz pasear entre ellos y además obtienes mucha información sobre las costumbres de distintas épocas.
Por otro lado pienso que es algo llamado a desaparecer pronto, pues cada vez más personas optamos por la incineración. Creo que es muy bonito recordar a los que se han ido en casa, en familia y hablando de ellos. En esto las fotos, una vez más, tienen una importancia tremenda.
Hola Victoria,
Me da la impresión que los cementerios están viviendo un renacer 🙂 La gente se acerca de otra forma a ellos. A mí me dan paz, pero solo de día… De noche no se si tendría valor acercarme.
Es cierto que la incineración está ganando a las inhumaciones pero también hay columbarios donde depositar las cenizas.
Dentro de 10 años ya veremos como evoluciona el 1 de noviembre.
Un abrazo!
Me gustan mucho los cementerios son lugares de paz para mi. Cuando era chica mi papa nos llevaba todos los sábados en una recorrida por nuestro árbol genealógico, contándonos historias,llevando flores, manteniendo. Soy yaciente de mi abuelo paterno y disfruto de esa recorrida en la que venero a mis muertos , me acuerdo de ellos y les llevo su flores preferidas!
Hola Mariana,
Qué bien que tengas un ritual con el que te sientas cómoda para conectar con tus muertos.
A mí también me gusta pasear por cementerios.
Un abrazo!
Hola, Mireia:
Este año he sentido la necesidad de visitar el cementerio donde están mis abuelos paternos. Es la primera vez en mi vida que voy en un día de Todos los Santos. Quizás ha tenido que ver el haber hecho este año el curso “Mi árbol y yo”.
Aproveché que mi hija mayor nunca había visitado un cementerio y tenía curiosidad. Aunque en mi familia materna no hay costumbre de llevar flores, ni siquiera ponerlas el día del funeral, me atreví a comprar un pequeño ramo para ellos. Y cuando las dejé sobre su tumba me sentí bien, les sentí presentes de nuevo.
También descubrí la tumba de los bisabuelos, de donde pude sacar incluso sus fechas de defunción y la de algunos tíos. Me hizo ilusión reencontrarme con mi bisabuela Juana, por la que nunca me había interesado y con quien comparto parte del nombre.
Creo que repetiré el próximo año.
Hola Ana,
Qué buena experiencia para ti y para tu hija en el Día de Todos los Santos.
Yo hace tiempo que no visito un cementerio y ya tengo ganas. La última vez pasé la mañana en el cementerio de Montjuich y fui dejando rosas en las lápidas de familiares, de desconocidos y de algunos personajes célebres allí enterrados.
Las flores dicen por nosotros lo que nos cuesta verbalizar sobre los antepasados y la muerte, por eso es tan emocionante traer flores a las tumbas.
Un abrazo muy grande!