¿Eres libre o tu destino está escrito?

Bienvenido al clásico, eterno y apasionante debate entre destino y libre albedrío…

¿Acaso yo me decanto por una o por otra respuesta a la pregunta que da título a este post?

NO.

Puede que tú si lo tengas claro, sí es así me gustaría que admitieras que en realidad es una creencia, no una verdad.

Científicamente no está demostrado ni que seas enteramente libre ni que tu destino esté escrito.

La epigenética está demostrando tanto una cosa como la contraria (recupera este post sobre el tema).

Y eso aunque suene un poco de locos, tiene sentido. Te lo explico…

Cada biografía se compone de partes predestinadas y partes buscadas

Cada uno de nosotros vive mitad la vida que otros han sugerido, a veces diseñado, y a la vez toma decisiones.

Lo importante es reconocer qué es ajeno y qué es propio.

Y, ¡eh! Lo ajeno no tiene porque ser malo y lo propio no tiene que ser fabuloso.

No todo lo que heredamos de nuestra familia es terrible, limitador e injusto.

Existen legados positivos, inspiradores, y gratificantes.

Y no todo lo que elegimos es genuino.

Vives en el siglo XXI y eso tiene un precio (también lo tuvo vivir en el XX, en el XIX, en el XVIII…).

Es un trabajazo localizar qué decisiones vitales has tomado por ti mismo, sin condicionamientos externos (tanto los de tu historia familiar como los de tu entorno socio-cultural).

Responde a estas preguntas:

• ¿Tu trabajo tiene que ver con la profesión de alguno de tus familiares o antepasados?
• ¿Una parte de ti está enfadada con la vida pero no tienes un motivo real para estar así?
• ¿La forma de ser de tu pareja se parece demasiado a la de tu abuelo?
• ¿El nombre que has puesto a tu hija ha sido el de algún familiar con el que no has tenido contacto o ya está muerto?

Está difícil ser genuino, no es imposible pero ¡buf! tendrás que estar preparado para cuestionarte muchos dogmas y asuntos que dabas por sentado.

Si quieres que te ayude a discriminar qué es tuyo y qué pertenece a tu pasado familiar, pídeme una cita por Skype.

¿Y tú qué crees?
¿Te sientes libre o atado?

Imagen: pexels.com