Recuerdo cuando hace un año reuní a más de 400 tataranietos en el Desafío Conecta con tu genealogía y casi al comenzar me llevé una sorpresa en el reto en que pedía que los participantes me contaran cómo se llevaban con sus apellidos.
Decenas de personas contestaron a esa pregunta afirmando sentirse muy orgullosos de su primer apellido o de ambos. La mayoría eran apellidos comunes: Giménez, García, Torres, otros sí eran más singulares.
Francamente yo no me esperaba esa respuesta generalizada porque pensaba que la gente tenía más claro que los apellidos no los elegimos, nos tocan (al igual que parte de nuestra familia), así que me impactó que eso fuera lo que podían destacar algunos tataranietos de sus apellidos, no si eran eufónicos (suenan bien), no si les gustaba su significado o si casaban bien con su nombre, etc.), lo que más destacaban de sus apellidos es que les producían orgullo… y satisfacción.
Durante esos días llegué a la conclusión de que en realidad esas personas no sabían qué decirme al respecto de sus apellidos, vamos, que algunos tataranietos no querían retarse a profundizar en cómo les hacían sentir sus nombres de familia, nombres transgeneracionales que llegaron a ellos por azares del destino o por estrategias familiares diseñadas con buena fortuna. A todos ellos y a ti si tú también hubieras respondido así a la pregunta, creo que os merecerá la pena que reviséis vuestra relación con vuestra genealogía.
Orgullo genealógico
El orgullo es un sentimiento legítimo, como todos, pero si se instala puede ocultar sombras que no se quieren abordar (eso es así con los apellidos y con otros asuntos). Puedes sentirte orgullosa de tus logros personales o de los de otras personas, hijos, padres, abuelos, pero el orgullo puede convertirse en vacua vanidad si no lo transformas en admiración, gratitud y luego en fuente de inspiración.
Y lo mismo pasa con una emoción llamada vergüenza. En el desafío hubo quien se atrevió a contarnos cómo su primer o segundo apellido le hacían sentir mal, bien porque su apellido nadie sabía pronunciarlo, por las bromas tontas o pesadas que le llevaban gastando desde pequeño o porque su apellido le recordaba a su padre que abandonó a su familia o que fue un maltratador.
Agradecí las reflexiones y confesiones de este tipo y aporté mi grano de arena en cada caso para que tuvieran un punto de vista más positivo sobre el apellido en cuestión porque es una lástima estar peleado con tu apellido, eso equivale a estar peleado con tu genealogía, lo mismo pasa con tu nombre, porque nombres y apellidos son pilares de nuestra identidad, por eso, si alguno de tus apellidos te hace sentir vergüenza ahonda para descubrir si lo que hay detrás es en realidad rabia contra un familiar o hartazgo por los juegos de palabras que te han hecho tantas y tantas veces.
Cada apellido tiene una etimología, una sonoridad y una personalidad pero eso no significa que debamos usarlo como estandarte, aunque todos conocemos a gente que lo hace en su día a día, hasta las empresas familiares: desde Osborne hasta Tous.
Vergüenza genealógica
Tampoco es sano rechazar tus apellidos, en este último caso lo primero es intentar una reconciliación (que pasa por la comprensión y acaba en la aceptación), aun así, si llega a un punto en que te resulta insoportable seguir teniendo uno o ambos en tu DNI o pasaporte sí que te animaría a que estudiaras cambiar tus apellidos o al menos el orden de ellos.
En España pueden cambiarlo por otro de uso común o el que utilicen habitualmente, las personas apellidadas Expósito o que porten cualquier otro que denote un origen desconocido y también aquellas que tengan apellidos que puedan dar lugar a graves inconvenientes o perjuicios.
Si quieres que te eche una mano para trascender las emociones que te producen tus apellidos o nombres, pídeme una cita y buscaremos una forma de solucionar tu malestar.
¿Tus apellidos te produce orgullo?
¿Sientes vergüenzas de tus apellidos?
Fotografía: Enrique Domínguez
Hola Mireia,
Mi bisabuela fue Expósito y mi abuelo Iglesias (de padre desconocido y ya lo registraron así al nacer, sin el Expósito). Yo soy Iglesias y más que orgullo lo que siento es admiración hacia mi bisabuela porque a pesar de haber sido abandonada por sus padres (de lo que no puedo opinar porque no conozco las razones que los llevaron a tomar esa difícil decisión) fue capaz de salir adelante y criar a sus hijos sola. Para mi es un referente de fuerza y capacidad para afrontar lo que se te presenta en la vida. Yo siento que con ella nació un nuevo linaje.
Qué bonito lo que dices María, nació un nuevo linaje, aunque intentaran señalarlo para mal, eso no debe haceros avergonzar ya.
Saludos
Soy Argentina, aquí no es tan común tener dos apellidos , sobre todo gente de mi edad (44 años).Aquí llevar doble apellidos es símbolo de alta alcurnia, nada más alejado de los orígenes de mi familia. Mi primer apellido es español, Díaz. Mi abuelo paterno llevaba el apellido de su madre ya que ella fue madre soltera dos veces en un pueblito en Galicia , a principio del siglo XX , en esa época era una vergüenza .
Mi apellido materno es de origen francés , mi abuelo nació en un pueblo en el sur de Francia, al pie de los Pirineos.
Mi hija lleva mi primer apellido. Díaz, porque también la tuve siendo soltera y esto no fue ningún estigma para mí pero no quise ponerle los dos apellidos porque no quería que parezca que fuera mi hermana y además dejarle lugar para que más adelante, si ella lo desea, se agregue el apellido del padre.
Al principio me dolía que no pueda llevar el apellido de su padre y pensé que las mujeres vamos quedando invisibilizadas en la genealogía familiar al perder los apellidos maternos de una generación a otra aunque si llevemos ambos apellidos, luego pensé que en realidad yo no llevo el apellido de mi bisabuela. Y mi hija el de su tatarabuela.
Hola Laura,
Heredar el apellido de una mujer me parece que tendría que estar tan bien como heredarlo de un hombre, otra cosa es que la paternidad no sea reconocida por el varón ya que es una injusticia.
Saludos
Hola Mireia, a mí me pasaba que no me relacionaba( N) con mi apellido en mi pueblo de origen, sino con el materno, ya que mi padre emigró ahí al casarse con mi madre,que era cuarta generación en el mismo pueblo y comerciantes que ponían su apellido al negocio ( único en el rubro), así que yo era la niña/hija/nieta de los Berbel/ Zamar, cuando mi apellido, único apellido es Cattaneo.
Un par de muchas veces tuve que aclarar mi apellido es ese.
Sentía que lo borraban a mi padre, que vivió 20 años en ese lugar ( y murió ahi) pero seguía siendo ” de afuera”.
Yo me mudé de provincia y ya no soy la chica/hija/nieta de nadie.
Hola Pau,
Gracias por compartir tu vivencia. Hay personas que esconden uno de sus apellidos por decisión propia, pero que otros decidan hacerlo por ti sin preguntar, es muy desconsiderado.
Saludos
Hola Me gustaría saber de dónde proceden mis apellidos o alguna información si puede ser. Mira son los siguientes Craquis, Díaz y Dé Úbeda. Muchas gracias.
Hola Alejandro,
Para saber de dónde provienen tus apellidos, como digo en el video hay que investigarlos.
Espero que te animes a hacerlo tú, si ncesitas ayuda tienes mi curso en línea, mi libro y también ofrezco sesiones de asesoramiento vía videoconferencia.
Saludos
Hola… Mi abuelo se llamaba Carlos Santos Micale y mí abuela Juana Isabel Nicoloso pero mí apellido es Micale…podrás decirme algo?? De mí descendientes??
Hola Silvia,
Supongo que te refieres a que si puedo decirte algo de tus ascendientes… Pues no, porque no los he investigado.
Si quieres que lo haga, escríbeme un mensaje privado y te envío un presupuesto.
Saludos