¿Cómo te gustaría que te recordaran cuando murieras?
¿Te apetecería que tus familiares te fueran a visitar a tu tumba o nicho?
¿Prefieres un columbario que guarde vuestras cenizas, que se queden en una urna en casa o las transformen en un diamante?
Si todavía no has tomado una decisión te sugiero que le des vueltas, que es muy sano pensar un poquito en la muerte y te pongas manos a la obra a redactar un documento de voluntades anticipadas.
Si eres de los que prefiere la cremación supongo que sabes que eso de esparcir las cenizas en el mar o el bosque está un poco mal: es muy simbólico y emotivo pero poco ecológico, no es solo por las cenizas sino por las velas, las flores y otros objetos que acompañan el ritual, así que desde este blog te voy a hacer unas propuestas verdes.
La primera opción es económica y personalizable. La urna Bios es un recipiente biodegradable que sirve para enterrar las cenizas junto a semillas que acabarán transformándose en un árbol. Por 75 € una parte de vosotros podrá dar vida a un pino o a la especie de vuestra elección.
Otra posibilidad es apadrinar un espacio de terreno: en México hay un parque entero en el que a parte de enterrar cenizas también se puede inhumar a los muertos sin ataúd y en España el Cementerio Parc Roques Blanques se pueden enterrar hasta 5 urnas biodegradables alrededor de un árbol autóctono que ellos llaman el árbol familiar. Sin duda, precioso, pero el precio a muchos se nos sale del presupuesto: desde 2504 €.
A mí me entusiasma la idea de que los muertos tengan sus árboles: reales y genealógicos… Eso es lo que nos quedará de nuestros seres queridos.
¿Eres más de inhumación o de cremación?
¿Te gustan las propuestas verdes?
Fotografía: artmemori.com
Hola Mireia, nos ha gustado mucho tu artículo, muy claro y directo en cuanto a la necesidad de hablar acerca de nuestros deseos respecto a la muerte y sobre los rituales de despedida “verdes”. Te agradecemos que hayas mencionado las urnas Bios como una opción ecológica, económica y sin duda muy trascendental, pues las familias podrán enterrar la urna en su propio terrero, muy cerca suyo. Lo podrán hacer quienes tengan casa de campo, huerto o jardín. También se pueden enterrar en el bosque o en el monte, siempre que no sea una zona protegida. Si alguien necesita más información, estaremos encantadas de explicar sobre el tema personalmente. ¡Un saludo!
Gracias Begoña,
Espero que el producto tenga mucha aceptación, yo todavía no tengo claro si inhumación o cremación pero lo tendré presente.
Nos leemos!
¡Ya lo he dicho, que la ecología y la genealogía tienen mucha relación! Me ha sorprendido el articulo del vínculo con información sobre los problemas con las cenizas. Cada día se aprende algo nuevo. ¡Gracias, Mireia!
De nada Yve! Si puede haber un tercer post geneaecológico lo habrá!!!
Yo creo que quiero mi urna Bios.
Gracias por el Pingback, algún día tendré que aprender cómo se hacen…
Me ha encantado la idea de lo de las urnas Bio, es algo bonito y que no da problemas a los que se quedan. Yo tengo claro que quiero incineración, pero siempre dije que hicieran conmigo lo que menos problemas diera, pues uno nunca sabe en qué momento y condiciones se va a marchar.
Me parece precioso servir de abono a un árbol, que tanto me gusta cuidar.
Hola Victoria,
Sea la idea que sea sobre tu funeral y entierro déjalo por escrito. A mí me parece que mientras no pidamos imposibles si los que nos sobreviven saben lo que nos gustaría que hiciéramos con nuestros restos y cómo despedirlos más agradecidos quedarán con nosotros.
Saludos!