Hace poco hablaba de la muerte eterna y de la reencarnación y hoy continúo con un tema parecido: los fantasmas…
En el videofórum de Caótica Ana una de las asistentes me hablaba de una amiga suya que había estado buscado con ahínco hasta encontrar una casa con fantasmas para vivir y hace poco David Roberto, un seguidor del blog, me escribía para contarme que la casa de sus suegros hasta hace poco tenía fantasmas:
“Un hombre joven con pantalones jeans, camisa color blanco y cabello rizado que se aparecía en un pasillo exterior del jardín de la casa durante el día, su apodo era el Chino; una niña de tez clara y ropa antigua de unos 10 años; un niño de tez bronceada de unos 12 años vestido con ropa antigua; una anciana que aparecía por las noches, caminaba por el pasillo de la casa en la oscuridad y atravesaba por la puerta (cerrada) de la recámara de mis suegros; un anciano que decía malas palabras; una niña pequeña jugando con una pelota; un hombre visible solo de la cintura para abajo y que reaccionaba a los sonidos o ruidos y otro que llamaban la sombra, pues solo se veía el espectro de un hombre pero como sombra. Esto sin contar con aves que volaban dentro de la casa por la noche, puertas que se cerraban, guitarras que sonaban solas, bebés llorando, etc. En el caso de esta casa, que yo sepa, esos espíritus no eran de familiares o antepasados, salvo una o dos excepciones”.
Él me preguntaba “¿Qué pensarías si pudieras contactar con antepasados ya fallecidos?” ¿Tú querrías? ¿Harías una sesión de espiritismo para contactar con ellos?
Yo no me veo haciendo experimentos paranormales, bastante trabajo tengo con la genealogía convencional pero creo que una entrevista con alguien del más allá podría estar bien a menos que el fantasma no quisiera cooperar o se pusiera agresivo, eso me decepcionaría como poco (en realidad me asustaría).
Tampoco quiero fantasmas en mi casa, alguna vez he escuchado un ruido raro, seguro que como cualquiera de vosotros, pero hace poco se me cayó encima una madera mientras pensaba en mi tatarabuela… ejem, prefiero no darle ningún significado.
A mí la verdad pensar en espíritus y fantasmas me da mucho yuyu. 🙂
¿Alguna experiencia con fantasmas?
¿Te gustaría tenerla?
Fotografía: flickr.com/commons
Uf! A mi me da mucho miedo también, auqnue es un tema superatrayente.
Yo no hubiera podido estar ni una noche en la casa que describe David Roberto. Hubiera salido corriendo a pasar la noche en casa de alguna amiga.
Pero sí, haría espriritismo pq echo mucho de menos a mis padres y para conocer a mi abuelo materno, del que toda la familia ha hablado mucho siempre y que murió cuando mi madre tenái 2 años.
Yo no podría visitar ni las casas de Scooby Doo…
Creo que cuando dejemos de tener miedo de hablar con nuestro propio espíritu…cuando conozcamos realmente nuestra propia naturaleza espírita…entonces podemos entrar en comunicación con otro espíritu, ya esté éste encarnado o desencarnado.
Feliz día.
Bonita reflexión, Adela!
bastant tinc amb els vius, només em faltarien els morts, que descansin en pau.
🙂
Pues la verdad recientemente tuve una experiencia con ellos no es por ser spam haha, pero si te interesa el tema puesdes leerlo (http://eljardindelacaverna.wordpress.com/2013/10/06/el-hotel-avelino-y-sus-voces-misteriosas-relato-veridico/) y a ver que piensas de las psicofonías! Un saludo 🙂
Gracias por compartirlo, el espiritismo, como digo en el post, es demasiado para mi… 😉
Anímate y hagamos una sesión en tu casa. Seguro que nos resuelven dudas.
En mi casa ni hablar que luego me tengo que mudar, no me atrevería a volver a entrar… No seáis malos conmigo!!! 😉
no hagan eso!! existe Dios y el otro, y Dios dice que no consultemos muertos. haci que si alguien nos contesta no es el muerto entonces quien sera? se que los muertos pueden mandarnos mensajes por algun medio ,pero si es importante, yo se q ellos me ayudan a q encuentre su historia.besos
Yo me haría caquita!
😉
Creo que todos tenemos curiosidad sobre algún asunto vivido por alguno de nuestros antepasados, algún capítulo de sus vidas no muy claro para nosotros y el cual quisiéramos conocer. Si pudiéra recibir aunque sea un solo mensaje o una imagen del “mas alla” para resolver o aclarar alguna duda, yo no cerraría los ojos a esa posibilidad.
Gracias Mireia
Saludos
David Roberto
Te entiendo David Roberto, yo también tengo dudas e incógnitas sobre la familia que sólo me sabrían resolver los protagonistas. A ver si logro resolver unas cuantas por medios que me den menos miedo… 😉
Creo que cuando abramos nuestro corazón lo suficiente nos vamos a poder comunicar con todos y con todo. El miedo es justamente lo que nos aleja de todo eso. Ningún familiar (muerto) nos haría daño. Si sabe que eso nos asusta, solo nos va a comunicar a través de la mente.
Pero a no olvidar, que todos somos uno. Así que en definitiva, incluso con los vivos, siempre estoy hablando conmigo mismo. Nadie existe, solo hay uno. A este nivel todo se percibe como separado (los vivos,los muertos, los santos, los animales, las plantas, todo)
Es tal como lo describe Enric Corbera, el hielo que se dividió en miles de pedacitos, pero forman parte de la misma agua.
Yo siento una fuerte conexión con la virgen maría. Una vez, me pareció ver su silueta en la pared de mi cuarto, en forma de sombra. Mis padres se casaron el día de maría auxiliadora (el 24 de de mayo).
La primera vez que actué en público, tuve que respresentar el papel de María (a ver si alguien me puede explicar por qué agarré al bebé Jesús al revés, que menos mal era un muñeco).
Pero bueno, yo estoy proyectando a la virgen maría porque soy ella, y todos lo somos. A la vez todos somos Jesús. Porque todo partió de una aparente separación. De a poco nos vamos uniendo.
Cuando se dio el bigbang, dejó un ruido en todo el universo, el ruido de la expansión, el cual aún se oye (y siempre se va a oir). Ese ruido hoy está diciendo que la expansión se está dando al sentido inverso, o sea, qeu el universo ya se expandió al máximo posible y está regresando a sí mismo. Esto me lo contó un escéptico total, que estudia astrofísica.
Creo que me fui de tema, pero en definitiva era eso. Integremos todo, porque en definitiva, es lo que está destinado a suceder. Integrar, unir, volver al inicio, al reino de dios en donde no existe separación.
En realidad ya ocurrió pero en este espacio de tiempo que estamos, parece como si faltaran AÑOOOSSSS.
Besos a todos!!!! (o sea a yo misma) jaja.
Hola Lorena,
Para llegar a integrar, sentir y vivir que todos somos uno uno tiene que tener una consciencia muy elevada. Yo todavía no llego a eso.
Gracias por explicarlo tan bien.
La genealogía me parece excelente para empezar a comprender el concepto de unidad. A mi me está ayudando mucho, porque si bien lo comprendía desde lo intelectual, cuando empecé a analizar de a poco mi árbol, sentí desde lo vivencial la gran conexión. Es como el comienzo de la integración yo creo, aunque no todos debemos estar destinados a empezar a sentir la unidad de la misma forma y en el mismo orden supongo.
Así como heredamos los conflictos de nuestra familia, también debemos heredar el sentimiento de unidad y varias cosas más.
Ayer me di cuenta justamente, que mi padre es como que repara desde el lugar de unir a la familia. Él es quien siempre está promoviendo las reuniones y llama a todos por teléfono para ver como andan. Y me di cuenta de algo, fue a un colegio que se llamaba “sagrada familia”, jaja. Más claro imposible.
Besos!!
Ahí le has dado Lorena,
Con la genealogía se puede trabajar la comprensión del ciclo de la vida (tienes que leer el post de hoy).
Las coincidencias a veces son más que eso, son mensajes. También tengo un post preparado que habla de ello. Últimamente estoy con ganas de escribir sobre estas cosas, ¡caray!
Un geneaabrazo!
El miedo es un mecanismo que no deja avanzar… ni ver.
¡Yo elijo fluir! Todos somos LUZ.
Sentir, en vez de razonar.
¡Buena semana queridos!
Así me gusta Iratxe, fluye…
Realmente es mejor no tener demasiados miedos 😉
Hola Mireia
Con la muerte de mis suegros, la casa pasó a ser propiedad de una de sus hijas, pero debido al paso de los años la casa presentaba fallas estructurales y fué recientemente reconstruida, solo dejaron los gruesos muros de adobe de la planta baja y alta, pero cambiaron pisos, techos, escaleras; casi todos los muebles de madera fueron reemplazados, hubo cambios en el diseño (cocina, recámaras, etc..y de aquella casona de aspecto algo sombrío pero con mucha alma quedó una casa moderna.
Como resultado, ya no se han presentado los de nuevo los espíritus, fantasmas, ruidos, etc.
¿sabes? creo que todos extrañamos la antigua casa, donde pasamos muchos ratos agradables.
El patio es muy amplio y uno de mis cuñados construyó alli su casa hace años; como haz de imaginar, su casa es “habitada” o “visitada” por algunos personajes de otra dimensión; los encuentros no son tan frecuentes como los que ocurrían en la antigua casa, pero si ocurren con relativa frecuencia.
Saludos
David Roberto
México
Hola David Roberto,
¡Hace ya 3 años del post!
Pasa el tiempo (volando) y tanto cambiamos nosotros, como nuestras casas y hasta los espíritus que las habitan.
Espero que me sigas contando sobre ella.
Un abrazo!
Varias personas me dijeron que ven a mi madre caminar por los pasillos del hospital rural, como solía hacerlo, donde trabajó hasta su muerte, de hecho la sala de pediatría lleva su nombre.
Habiéndola conocido y lo apasionada que era con su trabajo no me sorprende que haya elegido visitar ese lugar de todos en el mundo.
Gracias por compartirlo Pau. Seguro que si yo llegase a ser un fantasma también visitaría aquellos lugares que me importaron en vida.
Un abrazo