“Hay árboles que dan gritos verdes”.
Ramón Gómez de la Serna, Greguería 219
Hay árboles genealógicos que se muestran desnudos. En estas genealogías aparecen nombres y apellidos, fechas y lugares de nacimiento, con un poco de suerte, fechas de matrimonio y defunción. Y ya está, ya pueden ser admirados, compartidos, copiados.
Estos árboles genealógicos esconden tristezas, locuras, desilusiones, enfados, frustraciones, vergüenzas, agresiones, preocupaciones, desamores, accidentes, asesinatos…
Y también ocultan amores, alegrías, aspiraciones, recuerdos, amistades, éxtasis, sueños, miradas…
Hay árboles genealógicos que están vergonzosamente desnudos.
Hay árboles genealógicos que dan gritos verdes.
Si escuchas con un mínimo de atención a tu árbol genealógico, este no tendrá que gritarte.
¿Tu árbol grita?
¿Grita de otro color?
Fotografía: Enrique Domínguez
Deja una respuesta