“Ahora tengo 25 años y comienzo a entender muchas de aquellas cosas que los adultos se negaban a explicarme. Algunas las he aprendido, otras las he padecido, especialmente una que tiene relación con mi abuelo, un secreto familiar y una pescadería”.
¿Qué harías si descubrieras que te estás quedando calvo?
¿Te echarías potingues o no harías nada?
¡Ah, es que ya estás calvo!
¡¿Enhorabuena?!
¿Lo llevas bien o lo llevas mal?
¿Los calvos son más viriles?
¿Todos tus antepasados varones, por los dos costados, fueron calvos?
¿Qué pasa con las mujeres calvas, es que no existimos?
¿La calvicie se hereda?
¿Por vía materna o paterna (aquí hay controversia)?
¿Quizás es cosa de nervios y estrés o al que le toca, le toca?
¿Calvos fueron, calvo eres y en calvo te convertirás?
Muchas preguntas, muchas reflexiones y alguna respuesta son las que encontramos en el simpático documental Hijos de Sansón (Fills de Samsó) dirigido y protagonizado por Eloy Domínguez Serén quien a veces para consolarse se imagina como el heredero de un linaje ancestral de hombres brillantes e iluminados.
Eloy, un chico preocupado (algunos dicen que obsesionado) con su proceso de pérdida progresiva del cabello que decide investigar y hablar para desahogarse, que se cuestiona por qué le ha tocado a él, que pasa por todas las fases del duelo y para finalmente acabar resignándose porque un tipo de pueblo como él sabe bien que luchar contra la madre naturaleza es una difícil odisea: lo que ella te da, ella te quita. Está escrito en su ADN.
“Dicen que el secreto mejor guardado es el que todo mundo conoce y del que nadie habla”.
Yo de ti no me lo perdería, tanto si eres calvo como si no, es uno de los más divertidos documentales que he visto en tiempo (atención a la parte del secreto familiar).
¿Calvo?
¿Hijo y nieto de calvos?
Fotografía: fillsdesamso.wordpress.com
Viva los calvos
¡Viva!