Si tienes hermanos seguro que te sientes identificado… ¿A qué tu madre tampoco te llama o llamaba por tu nombre siempre?
La mía ni lo hizo en mi niñez y juventud, ni lo hace en la actualidad, aclaro que ni me ha creado un trauma ni pienso que esto sea muy grave. Sé que es superior a su voluntad. No es que me llame de otra manera que no me gusta, o con un apelativo cariñoso demasiado raro, es que me llama con el nombre de mi hermana o mezclando mi nombre con el de ella en cualquier orden.
¿Y sabes qué? A mi abuela y a mi abuelo maternos les pasaba lo mismo, confundían los nombres de sus hijos.
Cuando era pequeña llegué a pensar que mi madre tenía un problema, ¡¿por qué le costaba tanto llamarme por mi nombre?! pero ahora que ya soy madre…
¡¡¡Me pasa lo mismo!!!
Llamo a mis hijas con cualquiera de los sus nombres da igual que tenga delante a una de ellas, se me cortocircuitan las neuronas y lo mismo digo un nombre que otro.
¡He llegado a llamarlas con el nombre del perico!
Y soy sincera aunque no siento que haya un bloqueo importante allí, mi madre no me confunde con mi hermana y yo tampoco confundo a mi hija mayor con la pequeña, eso sí, me fastidia no poder evitar que me pase.
Sería diferente si cuando mi madre se dirigiera a mí me llamara habitualmente con el nombre de su hermana, su madre o cualquier otro nombre que no fuera del núcleo familiar, allí habría sí habría el indicio de algo por resolver.
¿Hay alguna explicación científica?
¡Sí!
Según el estudio publicado en la revista Memory & Cognition en 2016 no tenemos que alarmarnos por estos errores cognitivos ya que son habituales y universales.
Tiene que ver con la manera en que nuestro insconciente organiza nuestra memoria.
Los nombres de nuestros hijos pertenecen a la misma categoría “Familia cercana” y al querer acceder a ellos, confundimos unos por otros.
Me alegra saber que todo tiene sentido.
¿A tu madre le pasa lo mismo?
¿A ti te pasa lo mismo?
Dibujo: “Mother and child” de Guy M. Whipple en flickr.com/commons
A mí siempre m ha llamado la atención que mi abuela me llamase casi siempre por el nombre de mi tía (hija suya). Lo curioso es que me llamo igual que mi madre (su otra hija)!
En tu caso se complica más pero yo creo que a tu abuela le pasa lo que a mi madre con el añadido que la nieta se llama igual que su hija 🙂 Saludos!
A mí me pasa constantemente con mis dos hijos. Mi abuela confundía el nombre de sus 5 nietas, así que fácilmente podía decir dos o tres nombres antes de llamarme por el mío.
Lo estoy visualizando, tatarateresa! 😉
Mi madre se confunde mucho con los nombres de mis dos hermanos y a mi me confunde con mis tías (sus hermanas). Y mi sobrina mayor se queja de que mi hermano la llama por mi nombre… uhmmm..
¡Qué lío! 😉 Ya ves que no es la única, y mal de muchos…
Mi suegra lo hace con las nietas, hij@s y nueras!! yo la entiendo es que somos muchos!
Y mi hija muchas veces dice pama, no se si es para llamar a papa y mama a la vez o que…
Lo de PAMA también me suena, mis hijas lo han soltado alguna vez, ¡es gracioso!
Mi padre y mis hermanos evitaban llamarme Victor. Mi padre me llamaba “mozo”. Mozo,ven aquí, mozo vete por cigarros… En fin, triste!
Nunca lo he entendido…pero me hizo daño esto. Mi nombre es Víctor Emanuel y me parece un buen nombre. Es como si les diera coraje que me llamara así y lo evitaban.
Jamás lo entenderé pero aún hoy me causa tristeza, y ya han pasado casi 40 años.
Saludos
Hola Víctor,
¿Quién te puso el nombre? ¿Hace referencia a algún familiar? Repasa este post: https://tataranietos.com/2015/06/08/en-transgeneracional-es-fundamental-conocer-tu-nombre
Eso podría explicar por qué no te llaman por tu nombre, quizás la familia tiene un duelo bloqueado por un familiar llamado Víctor o Emanuel y aunque quisieron homenajearlo en un principio, es demasiado duro seguir usando su nombre para dirigirse a ti.
Saludos
A mí me pasa con mis hijas !!!! y ellas me dicen que por qué lo hago, y la verdad es que no lo sé pero me turba un poco. Supongo que habrá una explicación ligada al subconsciente y me encantaría saberla.
Si consigues una teoría interesante, Ana, contacta conmigo. Yo sigo convencida de que si la confusión es entre hermanos vivos es un tema de falta de concentración. ¡Digamos adiós al multitasking ya! 🙂
Mi mamá hace años que a veces me llama por el nombre de una mala persona que conocemos. En seguida se da cuenta y se corrije. Me pone muy triste… Me gustaría saber a qué se debe y cómo se cura
Hola Martín,
Entiendo que te sientas así. ¿Conoces a alguien que se llame así? ¿Puedes preguntar a tu madre por él o a algún familiar para saber por qué tu madre tiene anclado este nombre?
¡Un abrazo!
Soy hija única y mi madre nombraba a sus hernanas fallecidas antes de nombrarme. Me molestaba un poco, hasta que me acostumbré. Besos
Hola Lili,
Tenía que ser molesto e incomprensible.
¿Qué sabes de tus tías? ¿Hablaste con tu madre sobre sus hermanas para saber porque siempre estaban rondándole por la cabeza?
Saludos
Hola! En mi familia es un clásico llamar a los hijos y nietos “por tanteo”. Mi madre especialmente con sus nietos, una de mis hermanas con las demás hermanas (no tiene nietos todavía) y yo con mis nietos, repito el tip de nombrar a todos queriendo llamar al que tengo delante. Creí que eran cosas de un “cerebro blando” familiar, porque todos los míos se ríen como si jugara con ellos y me “ayudan” a que acierte. Así que a falta de teoría seria, ¡me acabo de sentir aliviada al leeros! No somos una familia “rara”. Saludos.
Hola Carmen,
Ya ves que explicación científica no tenemos pero somos legión los que como tú has dicho llamamos a hijos y nietos por tanteo. ¡Me ha gustado la expresión!
Un abrazo!
Eso también les pasa a los hombres, sean padres o no. A mi me ocurre constantemente.
Hola Felipe,
Vamos, ¡que nos ocurre a todos los cuidadores! 🙂
Mi mamá siempre confundía mi nombre con el nombre de su hermana, pero desde que ella (mi tía) falleció, no volvió a hacerlo. Qué tema éste, me pasa también confundir el nombre de mis hijos, cosa que había pensado que “a mí no me iba a pasar”, jaja. Saludos!!
Hola Cintia,
Todas pensamos que no haremos lo mismo que nuestras madres, y ya ves, nos sale…
Saludos