Abuela Lunática, Abuela Preocupona, Abuela Regalona, Abuela Rosa, Abuela Tacaña… Hasta 29 tipos de abuelas hay recogidos en Abuelas de la A a la Z de Raquel Diaz Reguera editado por Lumen.
El formato del libro me recuerda al famoso Princesas olvidadas o desconocidas de Rébecca Dautremer y Philippe Lechermeier, no es el primero que copia la fórmula pero no por eso deja de ser un libro ilustrado encantador que lo mismo vale para niños que para mayores que tengan un día soñador y especialmente melancólico.
Es un catálogo de abuelas peculiares y amables visto desde el humor y la fantasía, especialmente entrañable me resulta la Abuela Bruja, sé de una que repite a sus nietas que lo es y están empezando a creerla.
Si tus yayas están vivas aprovechalo aunque sean como la Abuela Tiquismiquis. No pospongas hacerles una buena entrevista.
Los que no tenemos esa suerte y las echamos de menos nos conformamos llevándolas en el corazón y dejando constancia de sus manías, defectos y virtudes en nuestros árboles genealógicos.
¿Cómo definirías a tus abuelas?
¿Me recomiendas otros cuentos?
Imagen: Raquel Diaz Reguera
PD: La misma autora y la misma editorial han sacado al mercado Madre solo hay una y aquí están todas y Abuelos de la A a la Z.
Buenos dias Mireia:
Si hoy hablamos de Abuelas, tengo que decirte que activaste una de mis debilidades. Yo tengo, bueno tenia tres abuelas y me explico.
Mi abuela materna, Julia se llamaba y no tuve mucho tiempo para conocerla bien, así que recuerdos hay pero son poquitos. Ella era una mujer de las de antes, de las que tenia obligaciones sin devociones. Ella entregada a la familia y la casa, sin mas voz ni voto. Ciertamente un poco inexpresiva , de las que te quiere pero le cuesta demostrarlo. Pienso que la vida la curtió demasiado y siempre pensé que se sintió sola la mayoría del tiempo. Me quedan sus recuerdos y aunque pocos ahí los tengo en mi memoria.
Abuelas paternas tengo dos, y me dirás : no es posible, será una!.
Mi abuela Rosario falleció cuando mi madre tenia casi dos añitos, de repente, una meningitis fulminante que en el año 39 se la llevó de la noche a la mañana. Dicen que físicamente me parezco a ella y realmente así es. Solo tengo de ella una foto en un esmalte, y es lo único que puedo recordar de ella de las tantas veces que lo he mirado. No tengo recuerdos más que los contados por mi madre que a ella misma le contaba su tía materna, quien la crió. Me hubiera encantado conocerla pero ya sabemos que la vida te quita, pero también te da y a mi me dio y mucho! Fue años más tarde cuando mi abuelo materno Antonio se casó con mi Yaya Ana. Ya sé ! digo Mi Yaya Ana. Es un poco extraño lo que os voy a escribir pero son los sentimientos que tengo hacia ella. Ella fue mi abuela en todo su extenso sentido de la palabra. Ella me enseñó, me regañó, me ayudó, me demostró, me ilusionó, me quiso tanto y tantas cosas ………
Entre nosotras no compartimos ADN, ni una sola gota de sangre, pero me ha regalado tanto durante su vida que ha sido y será MI Yaya Ana.
Sentimientos, cariños, emociones, tristezas compartidas, siempre junto a mí, juntas en esa relación tan especial que tuvimos ella y yo. Y en mi árbol también esta su familia, porque es la mía y sus memorias y recuerdos, aquellos que me contaba están vivos en mi y seguirán así de presentes siempre!
Hace treinta y ocho días que se fue, bueno su cuerpo físico se fue, porque ella esta conmigo, tan viva que la siento junto a mí, y recordarla cada día es devolverla a la vida .
Me imagino que todos tenemos una abuela especial, pero yo no se si en el libro de “Abuelas de la A a la Z” hay una Yaya Ana como la mía.
Un saludo,
Hortensia
Entiendo lo que dices. El parentesco no viene dado por la sangre, el vínculo hace el parentesco, aunque no sea oficial, qué más da… Se puede tener más de un padre, más de una madre y más abuelos que los que tocan en realidad.
Soy partidaria de poner en el árbol a todas las personas que nos apetezca, hasta animales si alguien quiere.
Estoy segura que no hubo una Yaya Ana como la tuya. Un abrazo Hortensia!
Gracias Mireia,
Es simplemente el vinculo que creamos entre nosotros, la fuerza y el sentimiento. ¡ Una unión mágica !
Un abrazo para ti también.
Mireia,
Yo no sé si eres consciente de la gran labor que realizas con tu Blog.
Y es qué tu brindas la oportunidad de poder compartir las experiencias vividas en nuestras búsquedas de familia. Juntos, todos nos entrelazamos a través de ti y sin darnos apenas cuenta , sutilmente nos ofrecemos genealogía los unos a los otros.
¡ Compartir al compartir ! Gracias.
Hortensia
Gracias Hortensia!
Ojalá lo poco que sé de genealogía os sirva para avanzar en el camino del autoconocimiento.
Agradezco mucho comentarios como los tuyos que enriquecen el blog.
Cada vez me doy cuenta de que la genealogía lo abarca todo y no doy abasto leyendo libros de disciplinas dispares.
Nos leemos!
Hola:
hoy en día con las separaciones, divorcios y nuevas parejas,cada vez habrá más gente con más de dos abuelas. los sentimientos del niet@ hacia ellas dependerá del amor que perciba por parte las abuelas.
Saludos
Turmalina
Hola Turmalina,
Estoy preparando un trabajo amplio sobre ello. A finales de año supongo que lo podréis leer.
Hola Mireia, desconozco si mis abuelas aparecen en la clasificación de la A a la Z del libro. Por alguna razón mis abuelas se salen del ideario de abuela. Las dos fallecieron ya y con una de ellas, la materna, con la que he tenido relación hasta su muerte, aún siento cierta oscuridad que gracias a la vida estoy en proceso de sanar por medio de la biodescodificación.
¡Cómo me hubiera gustado sentir el amor de una abuela, su consuelo, su calor, enseñanzas …! Siento que todo tiene su porqué, nada es casual. Me alegra mucho ver esas abuelas que aman a sus nietos-as, que los miman y enseñan y, esas historias de su vida… ¡Qué delicia!.
En fin, continúo mi camino intentando sanar y limpiar, aceptando el reto. Un saludo.
Ah, perdona, te podría preguntar algo relacionado con el tema “ser un doble de un ancestro”?
Hola Mª Antonia,
Todos hemos mantenido relaciones complicadas con algunos miembros de nuestra familia. Esto del amor familiar ideal es complicado de dar y recibir.
Puedes hacerme la pregunta, claro.
ahh me encanta el post! Ahora que soy abuela, todo cobra un sentido diferente.. no pude disfrutar de abuelas de sangre, solo tenía un abuelo, y su esposa,que era madrastra de mi madre,pero,para mi era mi abuela… me tiraba las cartas,y me encantaba estar en su casa..
a pesar de no tener abuelos amorosos,tengo un buen recuerdo de ellos dos… y ahora yo,como abuela, quiero ser amorosa y disfrutar desde todo el amor que me genera esa niña preciosa..
Una pregunta, Alejandra… ¿Qué tipo de abuela eres?… Abuela ??
Que interesante el tema de las abuelas,yo tuve las mías muy diferentes, la paterna fue muy buena, pero era inexpresiva para demostrar sus afectos, sabíamos que nos quería por sus acciones siempre a favor de sus nietas, pero nunca nos abrazó ni nos dirigió palabras afectuosas, a pesar que prácticamente fué nuestra madre, ya que ella se hizo cargo de tres nietas desde pequeñitas, porque nuestra madre nos abandonó, la recuerdo como una persona introvertida, abnegada, trabajadora, incansable, responsable, discreta, muy correcta,pero incapáz de mostar sus sentimientos,sé que fué una magnífica persona, pero no sentí su cariño.- A la abuela materna, no llegué a conocerla emocionalmente, en una acasión mi madre nos robó siendo aún pequeñas, no entiendo la razón, ya que no tenía la intención de estar con nosotras, pienso que trazó un plán con mi abuela, ya que nos entregó con ella y ésta inmediatamente nos llevó a un orfanatorio argumentando que éramos huérfanas, allí nos prometió visitarnos cada ocho días, pero no fué así, nunca regresó, gracias a una monja de buén corazón que se interesó en el llanto contínuo de mi hermana mayor, por la que se enteró que no éramos huerfánas que teníamos padre y que viviámos con él, mi hermana dió la dirección de nuestra casa y la monja escribió a mi padre , quién inmediatamente hizo los trámites para recuperarnos, y de la abuela no supimos más. Tiempo después la abuela nos visitó pero no logró que sintierámos por ella ningún afecto familiar, ni nunca aclaró la razón de su conducta, no sé que clase de sentimientos tendría, supongo que era sin sentimientos, ya que hizo lo mismo con su madre, la sacó de su casa donde vivía solita pero tranquila, muy querida y visitada diariamente por sus vecinas ,mi abuela la ingresó a un asilo de ancianos donde al poco tiempo falleció.- Qué clase de abuela habrá sido ?-
Muchas gracias por compartir con nosotros tu historia Mary,
Mientras te leía me he emocionado. Muchos hemos tenido abuelas (u otros parientes cercanos) abnegadas como dices, con una coraza impenetrable, incapaces de demostrar sentimientos aunque eso no significa que no los tuvieran. Fueron épocas muy duras aunque eso no justifica muchas injusticias.
Una abrazo fuerte!
Mireia, la pregunta te la he enviado al correo del blog. Gracias
Ok. Te respondo por e-mail.
Genial recomendación, voy a ver cómo me hago con el libro vía internet 🙂 Gracias
Me alegro que te guste!
Me encantó este blog mis abuelos ya fallecieron pero supieron dejar su huella en mi ,solo conocí a 3 de los 4 ,porque mi nonno paterno falleció unos 8 años antes de que yo naciera,sí pude conocer a mi nonna una italiana chiquita y preciosa de cabello plateado en canas ,yo amaba escuchar su voz con acento italiano y verla cocer o tejer esos zapatones de lana que nos daba en el invierno para que nuestros pies estuvieran calentitos.Lo hacía frente a una ventanita chiquita donde le entraba luz del sol .Le gustaba mucho atender su huerta o sus plantas y flores las cuales cuidaba con esmero.Por ella supe de su patria natal y de algunos momentos vividos en la primer guerra mundial ,lo cual siempre nos atrapó a mis siete hermanos y a mí con sus relatos.
Mis abuelos maternos nos dieron mucho de ellos y vivían tan cerca de casa de mis padres que cuando en casa estaba aburrida solo era cuestión de caminar una cuadra y ya está ….estaba en la suya.
Ellos fueron quienes cuando mi madre tuvo que salir a trabajar nos cuidaron,era precioso en verano salir a tomar mate juntos al patio y charlar,o reir cuando pasaba un auto tocando bocina y mi abuelo saludaba levantando un brazo y gritando !!!eeeeeeeeeyyy!!! y cuando yo le preguntaba ¿quien era tata ? el me respondía sonriendo ¿no sé ? y terminabamos riendo juntos.
Mi abuela era muy paseandera y le gustaba llevarnos con ella a donde fuera ,gracias a ella conozco muchos lugares de mi pais, era la abuela mas orgullosa de sus nietos ,según ella nosotros eramos muy calladitos y muy quietesitos,respetuosos podría definirnos mejor, daba gusto nuestro comportamiento y sus amigas siempre le decían halagos acerca de nosotros entonces ella mas contenta se ponía y yo mas roja de vergüenza quedaba .Mucho tengo para decir de ellos ,!!!que los amo con todo mi ser!!! y creo que quedo corta .
Con respecto a un lindo libro que mi hijo recibió de su abuela y me encantó es el libro “CON EL CARIÑO DE TU ABUELA” de Lidia Maria Riba .
Beso y gracias por este espacio.
Aqui agrego la tapa del libro http://ecx.images-amazon.com/images/I/41f%2B-BmMQwL._.jpg
Gracias por compartir tus recuerdos, me has transportado contigo y tus abuelos. ¡Cuánto amor familiar transmites!