“La gente cree que al llamarse Picasso uno lo tiene todo, pero eso está lejos de la realidad. Uno posee cosas, desde un punto de vista material, mucho más que otras personas, pero hay tantas otras cosas importantes en la vida… Mi combate ha sido existir por mí misma, más que por ese apellido”.
Marina Picasso
Hace unos días casi todos los periódicos se hacían eco de que Marina Picasso, la nieta del célebre pintor, se deshacía de parte su herencia, de toda no a su pesar (así no saturaba el mercado y las obras de Pablo Ruiz Picasso no perdían valor).
La pelea interna y externa que Marina mantiene con su herencia y su apellido (que la familia gestiona como una marca y que ella podría cambiarse si quisiera, por cierto) viene de lejos, proviene de su tensa relación con su abuelo al que en 2002 dedicó el libro: “Picasso, mi abuelo”. En él ofrecía una cara poco amable del mito. Explicaba que “Picasso tenía la necesidad de destruir para construir” y además de ningunearla, no trató bien a su padre alcohólico y a su hermano politoxicómano.
Su hermano Pablito estaba obsesionado por conseguir la atención de su abuelo sin éxito (seguramente por ser doble suyo genealógicamente hablando). A los cuatro días de la muerte de su abuelo se suicidó bebiendo lejía, agonizó durante días y murió.
Las herencias tóxicas
“Cuando uno no tiene nada y lo ha perdido todo, heredar es una condena”.
Marina Picasso
Cuando tu legado familiar es un lastre tienes dos opciones: puedes caminar con la carga a cuestas arrastrando los pies y quejándote de tu sino o puedes deshacerte de la carga con todas las consecuencias, es decir, que cuando es necesario empoderarse, uno tiene que cortar con la familia con todo el dolor que eso conlleva y sobre todo renunciar a los beneficios que producen las situaciones de malestar.
Hacer las cosas a medias sirve para obtener objetivos parciales que es lo que creo que ha conseguido Marina Picasso, ella ha comentado que los beneficios de las ventas de sus bienes van a parar a una asociación que ayuda a niños vietnamitas pero, ¿será eso suficiente para reparar las injusticias familiares?
Otras visiones de Pablo Ruiz Picasso
“Mi pintura es el libro de mi vida”.
Pablo Ruiz Picasso
En la exposición del año 2013 Álbum de familia del Museo Picasso Málaga se daba una versión diferente de la vida familiar del artista en la que otro de sus descendientes, Bernard Ruiz-Picasso, describía a un padre y abuelo cariñoso para quien la familia siempre fue lo primero (por cierto Marina y Pablito no aparecen en ninguno de los lienzos que Picasso, el resto de la familia sí).
Recuerda: las biografías, autobiografías y los árboles genealógicos son siempre parciales.
¿Se te hace cuesta arriba tu genealogía?
¿Cuánto pesa tu mochila?
Cuadro: “Retrato de familia” de Pablo Picasso (hay otro cuadro titulado igual del pintor).
PD: Me ha parecido interesante recoger en este post la existencia de un documental sobre “la memoria y la identidad de una familia, marcada por la relación del abuelo con Picasso” que se financió a través de crowfunding, se llama Mi abuelo y Picasso de Alfonso Martínez.
A mí, mi genealogía me pesa poco. Supongo que tiene mucho que ver la historia familiar de migración. Yo soy, mis padres lo fueron/son, y casi toda mi rama materna lo ha sido/fue (abuelos, bisabuelos… cuentan que una rama de la familia cuatro generaciones atrás vino a la península desde las colonias portuguesas). Hablo por mi, pero creo que este wanderlust (me encanta esta palabra) no te permite cargar con mucho peso genealógico porque no puede pesarme el mundo entero.
Aun así, tengo que confesar que siento mas afinidad por mi genealogía materna, la nómada, que por la paterna, donde generaciones quedaron en el mismo pueblo. Mi padre ha reconstruido el árbol de la familia hasta el siglo XV y, por lo que he podido ver, los movimientos fueron mínimos, y todos tenían unos rasgos en común – píos, con familias muy numerosas, de moral y costumbres mas inamovibles – ¡qué curioso!, cada vez que pienso en ellos siento una presión imaginaria sobre los hombros, similar a la claustrofobia.
Hola!
Pues el tema de la emigración pesa mucho para los que marchan y sus descendientes, veo en muchos árboles genealógico esa necesidad de conectar con los países de los que se proviene, nostalgia de algo que no se ha conocido pero sí se hablado mucho.
Si tus ramas contrastan por su movilidad e inmovilidad seguramente será por atracción.
Saludos