Hace unas semanas me fui con algunos de mis bártulos a Sant Boi de Llobregat, la ciudad donde vivió y vive una parte de la familia materna.
Cada vez que voy me siento como si hiciera un homenaje a mi abuela, una mujer que le gustaba tener contacto con su familia y no le daba pereza hacer un trayecto de más de una hora para encontrarse con los suyos. Esta vez había quedado con Carles Serret del Arxiu històric municipal de Sant Boi de Llobregat.
Mi primer contacto con Carles fue por correo electrónico hace un año cuando le pedí ayuda con la investigación familiar y él en cuestión de días me la facilitó y contestó con esmero todas mis preguntas.
Carles es santboiano, lleva más de 30 años dedicados a la recuperación de la historia de Sant Boi, en el archivo pronto cumplirá 15 pero como responsable de este pequeño equipamiento lleva 4. Podríamos decir que actualmente él es el archivo porque lo gestiona solo. Tiene los conceptos claros, sentido de la responsabilidad, un código deontológico definido y vocación de servicio. Reconoce que la crisis también ha impactado a los archiveros y les condicionará durante un tiempo. La falta de presupuesto para libros, carteles, trípticos y envío de cartas le ha obligado a buscar otras vías de acceso a la ciudadanía y estas se han encontrado en en Internet, especialmente las redes sociales que le han permitido seguir haciendo difusión de la historia del municipio e incluso amplificar el impacto de las acciones.
A su disposición tiene 300 metros lineales de documentación histórica y diversas bases de datos con decenas de miles de registros indexados (artículos, libros, imágenes) que le procuran material para todo el año.
Ahora mismo gestiona la web, un correo informativo, escribe en el blog del Museu de Sant Boi, administra un canal de Youtube y dos páginas de Facebook (en 2009 abrió un grupo que a finales de 2011 se convirtió en página): la del Museo y la del archivo, este último es el más activo y participativo tiene más de 4.300 fans (si se compara con las cifras de seguidores de archivos de larga tradición y de ciudades muchos más grandes, comprendes que algo debe estar haciendo muy bien).
Internet le ha permitido llegar a mucha gente que de otra manera no entraría por la puerta de Can Torrents, no porque no tenga interés sino por falta de tiempo o por lejanía. Sus usuarios ya casi no son historiadores e investigadores profesionales. Son ciudadanos de Sant Boi que les hace gracia ver imágenes de la gran nevada de 1962 desde su propia casa, niños que hacen trabajos para la escuela sobre los orígenes y el escudo de la ciudad, santboianos que han emigrado y sienten nostalgia al mirar fotos de Carnaval, personas que aunque nunca han paseado por Sant Boi tienen un vínculo especial con la ciudad porque sus antepasados vivieron en el municipio o aficionados a los trenes que se interesan por el Carrilet. Cabe destacar que el archivo ha ayudado a más de un centenar de represaliados, o familias de represaliados, que se han beneficiado de las políticas de recuperación de la Memoria histórica.
En nuestro encuentro me explicó que aunque puede parecer que hacer todo esto da mucha faena, no lo es necesariamente si eres organizado y previsor.
Así que archiveros del mundo, muestren lo que sus archivos albergan porque hay público ávido de conocimiento.
¿Cuál es tu experiencia en los archivos?
¿Conoces otros archivos que sobresalgan por su buena labor?
Fotografía de portada: Arxiu històric municipal de Sant Boi Fons Rosa Corrons Mas
Fotografía de Carles Serret: Mireia Nieto